Consejos para impartir un curso “casi perfecto”

La formación que impartimos hoy en día suelen ser a modo de cursos intensivos, uno o dos días, y generalmente específicos. A raíz de unas recomendaciones que nos dieron los chicos de Alfresco en Londres hace un tiempo, he reescrito estas recomendaciones. Son las siguientes:

• Deja el aula lista la tarde de antes y prueba que todo funciona OK.
• Al empezar escribe tu nombre y contacto en la pizarra. Además de presentarte, así los alumnos te verán más accesible.
• Asegúrate de tener todos los materiales listos para los alumnos (en digital o en papel), además de los paquetes que se necesitarán, como software, etc. No dejes que una conexión a Internet o un servidor te juegue una mala pasada, si nunca te han fallado los repositorios de CentOS, ese día te fallarán, ya sabes, la Ley de Murphy.

• Recibe a todos los alumnos dándoles la mano y con una sonrisa.

• Procura llamar a los alumnos por su nombre. Esto puede ser complicado si tienes más de 10 alumnos pero es algo muy positivo, te verán como más cercano.

• Indica algunos aspectos sobre las instalaciones, dónde se encuentra el WC, agua, etc.

• Deja bien claro el horario y duración del curso así como del desayuno y comida.

• Si puedes, limita la conexión a Internet, que lo usen sólo en los descansos.

• Asegúrate que todos los usuarios rellenan los cuestionarios de satisfacción al final del curso. Si no usas cuestionarios de satisfacción planteate usarlos ya que te permitirán mejorar.

• Procura tener los certificados de asistencia impresos para el último día, al final del curso los firmas y los entregas a cada alumno, dándoles la mano y agradeciendo su asistencia.

• Diviértete y aprende. Si hay alguna razón por la que me gusta impartir formación es por lo mucho que se aprende.